13 de mayo de 2013

El morbo minimalista de Park Chan-wook

Stoker (Stoker, 2013)

Dirección: Park Chan-wook
Guión: Wenworth Miller
Intérpretes: Mia Wasikowska, Nicole Kidman, Matthew Goode, Jacki Weaver, Dermot Mulroney.
Fotografía: Chung Chung-hoon
Música: Clint Mansell

Conocido principalmente por su violenta y morbosa "trilogía de la venganza", compuesta por los títulos Sympathy for Mr. Vengeance (2002), Oldboy (2003) y Sympathy for Lady Vengeance (2005), el director coreano Park Chan-wook ha levantado una gran expectación (y también cierto recelo) entre sus adeptos con la que es su primera película rodada en Hollywood. El resultado es un thriller familiar cargado de dramatismo que, si bien no decepciona, tampoco es la obra maestra que podría haber sido.

Stoker tiene todos los elementos que una historia de suspense necesita y Chan-wook juega con ellos con maestría. Llena de ecos hitchcockianos, desde el mismo personaje del tío Charlie -homónimo del interpretado por Joseph Cotten en La sombra de una duda (1942)-, hasta ciertas analogías estéticas del universo de Psicosis (1960), el filme es una provocación continua a los sentidos del espectador. El uso de los sonidos y las imágenes potencia la tensión de la atmósfera, el misterio y la sensación de oscuridad emocional de los personajes. Ciertas transiciones no pueden ser más sugerentes, como también toda esa serie de objetos y pequeños detalles que hacen de la cinta un apabullante compendio de maliciosos estímulos.

Los actores también contribuyen a elevar el conjunto, especialmente una espléndida Nicole Kidman algo desaprovechada, del que lo único que falla es el guión (curiosamente, firmado por el protagonista de la serie Prision Break, Wenworth Miller). Se echa en falta un clímax mejor trabajado sobre el papel que cierre las claves que propone con mejor estilo, coherencia y verosimilitud. Por lo demás, la propuesta resulta más que disfrutable, destacando la sutileza de su puesta en escena y la elegante (y enfermiza) narración que, pese a los fallos de guión, no decae en ningún momento.

Recomendado para los seguidores de Park Chan-wook y amantes del thriller de fino paladar.
No recomendado para maniáticos de la verosimilitud y los guiones perfectos.

3 comentarios:

El Expatriado dijo...

Ecos hitchcockianos? eso suena a que has aceptado esta pelicula como pura metadona de uno de tus directores favoritos...

El Expatriado dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Txisky dijo...

Park Chan-wook de nuevo me decepciona. Después de babear con Oldboy, el resto de su filmografía me ha dejado indiferente. A ratos aburrida, a ratos lenta, a ratos obvia: sólo salvaría algunos juegos estéticos, a la actriz protagonista y a su banda sonora. Aprobado muy justito.